«Esta distinción hacia un médico homeópata hace visible la homeopatía de una manera positiva y contrarresta la campaña de acoso contra esta rama de la Medicina». Es lo que opina César Cueto, médico homeópata que ha recibido el Cordón de la Ilustre Academia de Ciencias de la Salud Ramón y Cajal como académico numerario por su trabajo en el campo de las enfermedades crónicas y el método homeopático.
El gijonés destaca dos aspectos sobre el reconocimiento: «El primero es de ámbito personal. Me siento halagado de que se reconozcan mis treinta años de ejercicio profesional al servicio de los pacientes». Y un segundo aspecto «que supone la valoración positiva de la homeopatía. Sobre todo por la campaña de acoso que ha sufrido en los últimos meses. Que una academia con semejante prestigio reconozca el trabajo que realiza la homeopatía como algo positivo era necesario», destaca el galardonado.