Mientras los grandes medios de comunicación vomitan día sí día no sus titulares tendenciosos e injuriosos contra la homeopatía, en San Sebastián 160 médicos asistían a la I Jornada sobre Evidencias Científicas en Homeopatía. (1)
Porque frente a la corriente que intenta desacreditar esta disciplina, detrás de ella hay muchísima práctica clínica, médicos que la ejercen con muchos años de estudios y ejercicio a sus espaldas, infinidad de pacientes satisfechos… y ciencia, mucha ciencia.
En Tener S@lud hemos vivido el congreso desde dentro y vamos a contarle lo que allí ha ocurrido. Porque queremos que usted esté informado de lo que jamás le van a contar los otros medios de comunicación, tan solo empeñados en desacreditarla. Así podrá extraer sus propias conclusiones, que podrá compartir con nosotros al final de este e-mail.
Le presento al Dr. Fisher, el médico (homeópata) de la Reina de Inglaterra
Seguramente al Dr. Fisher no le gustaría que le presentaran de esa forma. Y es que su currículum es lo suficientemente deslumbrante por sí solo. Entre otras cosas, es director de investigación del Royal London Hospital for Integrated Medicine de Reino Unido (uno de los principales hospitales de medicina integrativa de Europa) y miembro del Consejo de Expertos en Medicina Tradicional y Complementaria de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es uno de los mayores expertos europeos en la materia.
Pero reconocerá conmigo que ser el médico personal de la monarca más longeva del mundo (en activo a sus 91 años) es algo que no puede dejar de mencionarse. La familia real británica lleva tratándose con homeopatía desde hace varias generaciones, desde la época de la reina Victoria.
Pero obviamente no fue de sus ilustres pacientes de lo que el Dr. Fisher (el del centro en la imagen de arriba) fue a hablar a San Sebastián. Su intervención se centró en desmenuzar los últimos avances científicos a nivel internacional en la materia.
No quiero abrumarle y no voy a detallarle todos, pero como pincelada debe saber que la base de datos científica Core-Hom (que recoge todo lo que se publica al respecto en publicaciones científicas y médicas) contiene a día de hoy 1.137 ensayos clínicos, 489 de ellos aleatorizados. Además, 534 son ensayos controlados frente a placebo y 174 ensayos comparativos frente a tratamientos convencionales. Cualquiera que tenga interés puede entrar en la base de datos online y comprobarlo. (2)
Me pregunto si es eso falta de evidencia científica…
Algunos de estos estudios comparan el uso de medicamentos convencionales frente a medicamentos homeopáticos. Uno, por ejemplo, estudiaba la fluoxetina (principio activo del famoso antidepresivo Prozac) frente a los medicamentos homeopáticos, resultando ganadores estos últimos.
“Hay muchas pruebas, mucha evidencia; muchos estudios de gran calidad y además reproducibles”, contaba el Dr. Fisher, deteniéndose también en la eficacia demostrada del Gelsemium (un medicamento homeopático muy utilizado para la ansiedad) y de otro a base de arnica para la cicatrización de los tejidos.
Me encantaría que los periodistas y columnistas que, al hablar de homeopatía, se limitan a repetir que “no hay evidencia científica” charlaran un rato con el Dr. Fisher… Quizá matizaran su opinión.
Marc Henry, el científico que vino a explicar por qué funciona la homeopatía
“Yo soy un científico. Podemos hacer filosofía respecto de la homeopatía, pero como científicos hay que estar a los hechos”. Toda una declaración de principios la del profesor Henry (el primero por la derecha en la foto de arriba).
Marc Henry es Profesor de Física y Química Cuántica en la Universidad de Estrasburgo. Allí trabaja con el premio Nobel de Medicina en 2008 Luc Montagnier en la investigación de las ultradiluciones dinamizadas, que son el medio de elaboración de los medicamentos homeopáticos, con los que se busca que se produzca una respuesta en el organismo para que él mismo reaccione y provoque la curación.
La física cuántica es una ciencia compleja, pero que está sirviendo para desentrañar la composición y estructura de los medicamentos homeopáticos, así como su mecanismo de acción.
Estos medicamentos se presentan en gránulos, glóbulos o gotas, y llevan siempre el nombre en latín de la materia prima (de origen natural), un número (que expresa la cantidad de veces que ha pasado por el proceso de dilución) y una o dos letras (que indica el tipo de escala o proceso utilizado para hacer la dilución).
Así, por ejemplo, una disolución que lleva 2C significa que la sustancia activa ha sido diluida una parte en 100 y luego una parte de esa disolución ha sido nuevamente diluida otra vez en 100. Por lo tanto, un preparado en una disolución 2C significa que tiene una parte de la materia prima por cada 10.000 partes de solución.
Se trata de una cantidad muy pequeña, pequeñísima, y eso es lo que lleva a los escépticos a asegurar burlonamente que los medicamentos homeopáticos no pueden funcionar pues “no son más que agua”.
Con los conocimientos científicos de los que se disponía hasta ahora, era imposible dar credibilidad a lo que la evidencia clínica y la mejoría de los pacientes mostraba: que los medicamentos homeopáticos funcionan. Pero la física cuántica ha cambiado las cosas.
La física cuántica estudia el comportamiento de la materia cuando sus dimensiones son diminutas, a escala nanométrica o incluso menor. Los avances en la física cuántica han ido permitiendo avances que hasta hace nada parecían de ciencia ficción: en electrónica, computación, nuevos materiales, altas energías, criptografía… y homeopatía.
En las diluciones homeopáticas lo que queda no es sólo agua, sino “agua con algo”. Y ese algo, que es información codificada en su estructura, es lo que actúa en la célula. Antes no podía medirse, pero ahora sí.
Y para hacerlo, el profesor Henry tomó dos remedios homeopáticos, el Cuprum metallicum y el Gelsenium sempervirens, estudiando qué hay en ellos tras cada dilución. Para ello utilizaron resonancia magnética nuclear y una técnica muy nueva de análisis electrofotónico.
Y llegó la evidencia: tras cada dilución siempre queda algo, hasta en las diluciones más altas. Y cada dilución puede actuar de forma diferente a nivel celular.
“Los remedios homeopáticos no son agua y azúcar; sino que se usa agua y azúcar para transmitir la información que contienen”, concluye Marc Henry, que reclama más inversiones en investigación para precisamente dotar a la homeopatía de mayor evidencia científica… de esa precisamente que les achacan que no tiene.
Niurka Meneses: la homeopatía funciona en las plantas… ¿también es “efecto placebo”?
Niurka Meneses (la sonriente mujer que aparece a la izquierda de la foto) es investigadora y profesora en el departamento de química y bioquímica en la Universidad de Berna, en Suiza. Es una de las figuras más relevantes en agrohomeopatía, es decir, en la aplicación de la homeopatía a las plantas.
La investigadora Meneses llegó a la homeopatía desde el escepticismo, según contó a los asistentes al congreso. Enferma de asma desde hacía muchos años, casi a la desesperada fue a dar con un médico homeópata, que consiguió (frente a su propia sorpresa como paciente) que sus crisis asmáticas se fueran espaciando, fueran menos intensas, y finalmente desaparecieran por completo. Intrigada por una práctica médica y farmacológica que no entendía, decidió estudiarla y aplicarla en su propio laboratorio… agrícola.
Ha hecho infinidad de experimentos y está desarrollando un método propio que permite controlar plagas y enfermedades, ayudar al crecimiento de las plantas, potenciar el efecto de los biofertilizantes, lograr cosechas más abundantes y nutritivas… y sin una sola gota de sustancias químicas.
La doctora Meneses compartió algunos de sus hallazgos con los asistentes, como usar Calcárea carbónica 30 CH para eliminar las babosas en las plantaciones de lechugas, usar Silícia terra en plantas con crecimiento lento o atacadas por hongos o Apis mellífica en plantas muy delgadas a causa de una alta producción.
Oyéndola es difícil no pensar que la difusión de la agrohomeopatía supondría un avance enorme para los productores, tanto por su bajo coste como por la independencia que les permitiría tener respecto a los fabricantes de agroquímicos, así como la obtención de cosechas libres de químicos y ecológicas. Vamos, que beneficiaría a los productores, a los consumidores y al medioambiente en general.
Y además, tendría una ventaja adicional, tal como destaca la doctora Meneses: “contribuir a acabar con otra de las críticas recurrentes hacia la homeopatía: la de los que dicen que no funciona, sino que es sólo el efecto placebo”.
Realmente, ¿cree usted que cuando se administra homeopatía a unas lechugas y a otras no, o a una fila de rábanos y a otros no, las plantas que son tratadas experimentan el efecto placebo y hace que desaparezcan las babosas, los hongos o crezcan mejor?
Dr. Elio Rossi: 20 años de experiencia de la homeopatía en la sanidad pública en Toscana
¿Se imagina un sistema de salud público en el que la homeopatía, la acupuntura y la fitoterapia estuvieran incluidas y los pacientes tuvieran acceso a ellas con total normalidad y sin coste adicional? Pues eso ocurre en Italia, concretamente en la región de Toscana.
Para lograrlo la clave fue integrar la medicina complementaria en el plan sanitario de la región, y de allí pasó a reconocerse a nivel nacional. El Dr. Elio Rossi (tercero por la izquierda en la fotografía de arriba), médico especialista en enfermedades infecciosas y director de la Clínica Homeopática del Hospital Provincial de Lucca, estuvo desgranando ante los asistentes la experiencia tras 20 años de funcionamiento, que dio el año pasado servicio a 2.500 pacientes de forma presencial, reforzado con un servicio telefónico.
Especialmente llamativo (con ojos de aquí) es el tratamiento de los pacientes oncológicos, que reciben una asistencia integral, atendidos por oncólogos responsables de sus tratamientos con radioterapia o quimioterapia pero trabajando codo con codo y en perfecta coordinación con homeópatas, fitoterapeutas y acupuntores. (3)
“El 90% de los pacientes llegan a la consulta remitidos por el oncólogo, y les atienden a la vez el oncólogo y el especialista en medicina complementaria”, detalla el Dr. Rossi, que destaca que este tipo de pacientes reciben consejos muy amplios, específicamente de tratamiento oncológico pero también tratamiento complementario y consejos de dieta, actividad física, etc.
Dr. Díaz: desmenuzando los resultados del EPI3
Francia es otro lugar en el que la medicina complementaria está integrada en el sistema de salud público. Por eso en el marco de esta jornada también se habló de los resultados del EPI3, el mayor estudio fármaco-epidemiológico realizado en atención primaria en el país vecino. (4)
En este amplio estudio, realizado por un equipo independiente y publicado en 11 artículos científicos de diferentes revistas internacionales, han participado 8.559 pacientes y 825 médicos de Atención Primaria. Todos los grupos de médicos usan diferentes tipos de métodos terapéuticos según su elección, incluyendo medicamentos convencionales y homeopáticos (es decir, que los medicamentos con los que trataban a sus pacientes, fueran homeopáticos, convencionales o ambos, eran los que ellos consideraban en cada caso concreto según su criterio).
Sus conclusiones las desmenuzó el Dr. Gualberto Díaz, Médico Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria en nuestro país y Responsable Científico de la Asamblea Nacional de Homeopatía.
Sus resultados son accesibles a quien quiera consultarlos, pero por destacar algún dato, ponen de manifiesto que los pacientes participantes en el estudio con infecciones respiratorias tratados con homeopatía tomaron un 57% menos de antibióticos; los que tenían dolor músculo-esquelético consumieron un 46% menos de antinflamatorios; y los que padecían depresión, ansiedad y sueño utilizaron un 71% menos de psicotrópicos. “Se ha demostrado que se pueden consumir menos medicamentos convencionales, como los antibióticos, los psicótropicos o los antiinflamatorios, cuyo uso indebido es un problema de salud pública. Además, esta disminución en el consumo de medicamentos reduce a su vez las reacciones adversas asociadas a su toma”, explicó el Dr. Díaz.
¿Y usted qué opina?
En Francia, Alemania, Austria, Suiza, parte de Italia y muchos otros lugares la homeopatía está incluida en la sanidad pública. En Australia, Israel, Cánada y Japón, entre otros, se utiliza con absoluta normalidad. En Estados Unidos su uso se ha incrementado un 15% en cinco años… Da qué pensar. Los médicos homeópatas son médicos como los demás, sólo que además de recurrir a los recursos convencionales (¡por supuesto que prescriben antibióticos cuando es necesario, por poner un ejemplo!), recurren también a esas otras alternativas, buscando la mínima agresividad de los tratamientos y la curación de las patologías desde dentro del propio paciente.
Y otro dato llamativo analizado en la jornada y en el que coinciden todos los estudios y encuestas que se realizan a lo ancho y largo del mundo: los pacientes que recurren a la homeopatía tienen un nivel educativo más alto y un estilo de vida más saludable, además de una actitud más activa respecto a su propia salud. También da que pensar, ¿verdad?
Esta es la crónica de la I Jornada sobre Evidencias Científicas en Homeopatía vivida desde dentro.
La homeopatía está viviendo últimamente agresivos ataques. ¿Qué piensa usted? Nos gustaría saber su opinión, por lo que le invitamos a compartirla con nosotros justo aquí debajo.