El Estudio EPI 3, que nos habla del impacto de la práctica médica realizada por los médicos homeopáticos y de su interés para la salud pública, fue el tema principal del último programa “Así es la Vida” de Radio Popular. Se trata del mayor estudio fármaco-epidemiológico realizado con médicos de Atención Primaria (más popularmente conocidos como médicos de familia) en Francia, que ha sido desarrollado por un equipo de investigación independiente de prestigio. El estudio se ha elaborado durante 11 años de trabajo, y han participado más de 8.000 pacientes y 825 médicos de Atención Primaria. En total se han realizado cuatro estudios: uno transversal y tres de cohortes de infecciones de vías respiratorias altas, de dolor músculo-esquelético y sueño-ansiedad y depresión.
El estudio refleja que el mismo perfil de pacientes y con la misma gravedad cuando han sido atendidos por médicos formados en homeopatía, han obtenido resultados clínicos similares y sin pérdida de oportunidad que los atendidos por médicos que no la usan.
Según el doctor Guillermo Basauri, lo que viene a decir este estudio es que el grupo de pacientes atendidos por médicos homeópatas, ha obtenido similares resultados o mejores, pero nunca peores. Además, el estudio ha reflejado que estos pacientes tratados con homeopatía recibían al final la mitad de medicamentos de otro tipo como antiinflamatorios, antibióticos y ansiolíticos, en concreto, dos veces menos antibióticos, dos veces menos antiinflamatorios y tres veces menos psicotrópicos.
“La moraleja de todo esto es que si tu médico utiliza homeopatía va a necesitar menos de la mitad de otro tipo de medicamentos para finalmente conseguir que el paciente esté igual de bien, unos medicamentos con efectos secundarios y que son más dañinos. Hay que tener en cuenta que hoy en día la tercera causa de muerte en el mundo son los efectos secundarios de los medicamentos.
El medicamento homeopático no sólo ayuda a reestablecer la salud sino que incluso una vez que te encuentras bien, ayuda a que la persona esté más sana. Estos medicamentos son muy recomendables incluso para las personas mayores porque ayudan a mejorar y a sostener la función de los órganos importantes como los riñones, el hígado, el corazón, es decir, aún cuando no estamos enfermos contribuyen a que nos sintamos mejor, a que esos órganos sean más resistentes. Son medicamentos de sostén vital, y de cara al último tramo de nuestra vida van a ayudarnos a estar más sanos y fuertes y esto reduce el coste sanitario porque hay menos complicaciones, menos ingresos hospitalarios, menos ingesta de otros medicamentos, etc.
“Uno de los terrenos donde la homeopatía hace una muy buena labor de acompañamiento es en las cirugías. La homeopatía ofrece medicamentos para preparar el cuerpo y que cicatrice mejor, para que sangre menos, y si hay un problema de fondo, que el organismo esté mejor preparado y que haya menos posibilidad de complicaciones, menos dolor e inflamación. Igualmente puede conseguir que el tiempo de pos-cirugía sea menor al igual que el ingreso.
La ventaja del medicamento homeopático es que nos permite utilizar sustancias como medicamentos que en otro tipo de concentraciones sería peligroso usar. Es interesante tener un medicamento que recoge todo lo bueno de una sustancia y separa los efectos no deseados. Se puede usar homeopatía en un pequeño de meses para cualquier situación quirúrgica que tenga que pasar, en una mujer embarazada o en una persona mayor.
En los extremos de la vida la homeopatía actúa de forma excelente”, comenta el doctor Basauri.
“Hay medicamentos homeopáticos que en el ámbito quirúrgico siempre van a estar presentes, medicamentos como por ejemplo el Árnica, que actúa en las heridas o fracturas. Busca mejorar, cuidar o aliviar, siempre que hay un componente traumático. Después, depende de la cirugía y de la zona donde se practica, de las posibilidades de infección…
Según un estudio que se realizó en una unidad de cuidados intensivos de Austria la gente intubada tras una cirugía y que padecía EPOC presentaba muchos problemas a la hora de desentubarla, pues al tener mucha mucosidad propia de su problema respiratorio se generaban múltipls complicaciones. No obstante, un ensayo clínico demostró que tras dar homeopatía a un grupo de esos pacientes, finalmente éstos producían menos moco y tardaban menos tiempo en quitarles el tubo y en salir de la UCI y evolucionaban mucho mejor”.